Me he propuesto hacer una serie de post desgranando distintos supuestos que introduce la Reforma Laboral que aprobó el Congreso hace unos días con el voto solitario de un Partido cada vez menos obrero y socialista (recordemos que al Partido Popular de los Trabajadores millonarios le parece escasa).
Una de las nuevas figuras que se introduce es la del despido preventivo, es decir, el empresario puede despedir “por si acaso”. Algo así como la guerra preventiva de Aznar. Si a Irak nos fuimos a buscar armas de destrucción masiva “por si acaso”, ahora el empresario puede despedir con arreglo a simples conjeturas de futuro, es decir, ” por si las moscas”.
Al empresario le bastará alegar que piensa, cree, supone, etc… que va a tener problemas en el futuro, para que los despidos estén justificados. Antes de la Reforma el despido siempre sería injustificado al no presentar la empresa una situación actual de dificultad. Dejan, por lo tanto, el despido sujeto a la simple discrecionalidad de una bola de cristal en manos del empresario.
La Reforma Laboral convierte a los empresarios en la “bruja Lola” no sé si capaces de leer futuros pero sí de hipotecarlos.
Fuente: Izquierda Unida
Cursos del sector
No hay comentarios:
Publicar un comentario